Claudia Inés Usubiaga*

“Cuando un amigo se va, queda un tizón encendido

que no se puede apagar/ni con las aguas de un río” (Alberto Cortez)

 

Por NORA PATRICIA NARDO

 

 

Con la partida de Claudia, uno, ya desde el recuerdo que nos impone la ausencia, tiene la certeza de que ella fue un ser humano, que siempre tuvo muy en claro su lugar en este mundo. Como Lic. en Psicología, formó parte junto a  algunos de nosotros, de la primer camada de profesionales psicólogos que comenzó a trabajar en escuelas de nivel medio, escuelas técnicas dependientes del Consejo Nacional de Educación Técnica a principios de los años 80, con cargos docentes no acordes a nuestra profesión. Arduo fue el camino-casi veinte años- hasta lograr que los profesionales psi, a instancias de una ley aprobada por la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a comienzos del nuevo siglo, nos posibilitara trabajar en dichas instituciones con el cargo profesional de psicólogo, abriendo un campo laboral importante para nuestra profesión, en el área educacional. Junto a Claudia y por pedido de nuestros pares, me tocó defender el porqué de la importancia de esta ley frente a los legisladores de la Comisión de Educación, quienes en su mayoría y de muy buen grado, en una madrugada de Diciembre del año 2000, terminaron aprobándola.

Con Claudia se va una luchadora cabal, de mucho temple, una profesional seria, responsable, consecuente con su profesión, con muy buena formación teórica y de gran capacidad operativa frente a diferentes problemáticas en las que debió intervenir en las escuelas.

Con ella, también se va una querida amiga y compañera de ruta.

Vaya, si la estamos extrañando…

 

 Lic. Luis Raúl Calvo

 

 

Pensar en Claudia en tiempo pasado  ahoga la potencia de este hoy,  al evocarla aparece la  nostalgia  por lo que fue y por lo que no será. Todos aquellos que hemos tenido la oportunidad de conocerla estamos seguros que  en este transito dejó marcas,  fruto de su vida intensa, de su  fortaleza.  Creativa, ingeniosa, llena de energía con ribetes de intelectualizaciones profundas. Una profesional de una mirada autónoma, directa, enraizada en la realidad circundante de los adolescentes, de las instituciones educativas, con intervenciones de  rigor científico, con idóneo conocimiento y experiencia, con apelaciones transparentes.

Por eso se impone recordarla, fue una profesional psi que creaba un clima propicio para el trabajo en equipo, potente fecundadora, dosis refrescante, enérgica que encontraba en su conocimiento teórico y  en su quehacer cotidiano una lectura amplia de la realidad. De vuelo retórico con tonos de una excelente oratoria confirmaba el camino elegido, valiente, luchadora, gozosa de sus elecciones profesionales.

“Con Claudia nos conocimos  en el año 1980 cuando el CONET (Consejo Nacional de Educación Técnica) comenzó a incorporar a psicólogos y psicopedagogos para integrar las denominadas, en aquel entonces “Unidades de Orientación Vocacional” que funcionarían en las escuelas técnicas de nivel medio. Era una época difícil, marcada por la dictadura militar pero no obstante, ambos, recién recibidos de psicólogos, veníamos con mucha energía y con el deseo de aportar lo mejor al sistema educativo. Con errores y aciertos fuimos avanzando, a paso firme. Buscábamos capacitarnos y perfeccionarnos, poniendo en ello, sobre todo, mucha pasión. Fueron años intensos. Poco tiempo después Claudia pasa a desempeñarse en el mismo cargo en la E.T. Nro. 19. La etapa compartida con la Lic. Usubiaga fue corta pero muy valiosa, de formación y crecimiento, que marcó nuestro posterior ejercicio profesional como psicólogos en educación. Paralelamente a ello, se daba otro aspecto que hacía a nuestra labor, lograr el reconocimiento profesional dentro del sistema o sea la incorporación del cargo de psicólogo al Estatuto del Docente. Esto da comienzo en la década de fines de los ochenta, toda la década de los 90, una intensa, incansable e ininterrumpida lucha llevada a cabo a través de un grupo de psicólogos y psicopedagogos, como ser entre otros: Licenciadas/dos Mabel Campagnaro, Luis Raúl Calvo, Claudia Usubiaga, Nora Patricia Nardo, Fernanda León, Alicia Luque, Nelly Kaplan, Carola Martinez, Claudio Hinojosa,  etc. con la colaboración también, entre otros, del suscripto, pudo obtenerse tal objetivo en el año 2000. Por todo lo relatado, quiero rendir mi homenaje a Claudia a quien siempre recordaré con mucho cariño”. Lic. Mario H Schilman, psicólogo.

“Conocí a Claudia en el año 1992. Me encomendaron resolver una problemática difícil en una Escuela Técnica y allí la conocí. Desde ese momento y hasta mi jubilación, en el año 2013, disfruté de su profesionalismo y su calidad de persona de bien. En algunos momentos más cerca y en otros más distante, pero siempre con la misma actitud colaborativa y diligente, siempre con su sonrisa y profesionalismo ajustado a la solución de la problemática planteada. Gracias Claudia”.Prof. Carlos Cattaneo, Supervisor y Director de Área de Educación Media y Técnica (1998/2000) en el GCBA.    

Su ausencia duele y duele mucho, pero entre una gota y otra, más allá de nuestras lágrimas, el río sigue su cauce y vierte agua bendita, respira cada amanecer y acaricia el sol.  Allí muy cerca y en cada uno de nosotros Claudia se desliza con una palabra justa, reinventando nuevos escenarios, enunciando nuevos modos de intervención,  con su amplia percepción de los hechos circundantes. “Ha sido mi maestra, una gran persona y una excelente psicóloga, gracias”. Lic. Raquel Soriano, psicóloga de la  E.T. Nro. 19.

No se quedaba en un lugar de comodidad, luchaba contra los cánones autoritarios establecidos,  daba batalla, no se resignaba ante las negativas, pujante trasuntaba la cotidianeidad rompiendo con la mediocridad circundante. Agregaba valor  con sus intervenciones. Claudia se reafirmó  en todos los lugares que ocupó, desarrollando diferentes actividades, fiel a sus concepciones, su moral e intelectualidad, concorde con un espíritu de trascendencia.

“Claudia fue una compañera muy comprometida con su trabajo desde  el COE (Centro de Orientación Educativa) y luego a través del  Departamento de Orientación Educativa de la ET Nro.19 “Alejandro Volta”. Como psicóloga siempre estuvo atenta y dispuesta a la resolución de los conflictos presentes en la tarea educativa, armonizando situaciones disruptivas entre el alumno y el docente, o en distintas problemáticas en el proceso de enseñanza-aprendizaje que podían emerger desde cada actor en particular. Ahí estaba Claudia con su cuaderno en mano, haciendo las anotaciones necesarias para luego sacar en base a las mismas una conclusión, y orientar hacia una posible solución consensuada. Así sin perder su alegría trabajaba seriamente”, Héctor Riquelme, profesor de la E.T. Nro. 19.

Entre los temas que le preocupaba y se ocupaba estaban: los escenarios actuales en educación y la diversidad de estudiantes, cómo las crisis atraviesan las instituciones y por lo tanto la necesidad de re-pensar las prácticas docentes más adecuadas, que puedan contribuir a sostener al estudiante socialmente vulnerable favoreciendo y generando en ellos factores resilientes, ayudándolos a construir un sentido a su vida. Sobre la ética del profesional psi, su responsabilidad en educación, acerca de los métodos de resolución de conflictos. La importancia de los consejos de convivencia y los consejos de aula,  la figura del tutor, articular proyectos de prevención y de convivencia para facilitar la permanencia de los alumnos y sus aprendizajes. Generar las condiciones para el acceso en 6° año a las prácticas educativo – laborales, la importancia de la orientación en las elecciones de sus futuras profesiones o trabajos; entre algunos de los temas.

En la década de los 90 y hasta  principios del 2000 se comienza a perfilar  un acontecimiento capital, que iba a convertirse en el núcleo de un grupo mayor de propósitos, teniendo como meta que no sólo sea un hilo de voz, sino un grito de un colectivo organizado, unido, basado en las convicciones democráticas, mostrar el problema y las posibles soluciones. Junto a un pequeño colectivo de profesionales psi, Claudia alzó sus banderas: -reivindicar el papel del psicólogo dentro de las instituciones educativas- por lo que dio sus aportes a dicha causa, se movilizó para que los profesionales fueran llamados por su nombre y sus cargos correspondieran a su función. Habló con legisladores, ministros de educación a fin de que conocieran la verdadera situación de los profesionales psi  dentro del sistema educativo. No se quedó con las declaraciones de intenciones, sino que hizo  hincapié en   temas claves: – como la función de los psicólogos dentro del sistema-,  saliendo de la postura tan cómoda de lo individual  para comprometerse en la lucha de los nuevos ideales, lejos de la quietud, del conformismo, decidida a proyectar una educación digna para todos.

Una mujer impecable, compañera incondicional, excelente madre y esposa. Lectora incansable, autoexigente,  allanó caminos respondiendo siempre a la altura de las circunstancias, mostrando con hechos como   debe intervenir un/a psicóloga/go  institucional dentro y fuera del sistema educativo, como se debe integrar a cada uno de los protagonistas en el entramado escolar

“Fueron muchos años de alegrías comenzando desde pequeñas hasta adultas. Siempre muy buena alumna, aplicada, excelente deportista, gran compañera dispuesta a escucharte. Muchos años vividos desde nuestra infancia, escuela, reuniones, fiestas. Los secretos, los primeros bailes, los noviecitos, las confidencias, hasta llegar a los casamientos, hijos, padres, amigos … y vida de adultas.… como nos cuesta tu ausencia. Para nosotras, las chicas Mater seguirás siendo nuestra querida CLAUDIA USU para el resto de nuestros días”.  Viviana Patallo, compañera y amiga de estudios de la secundaria Mater.

 

*Claudia Inés Usubiaga: Licenciada en Psicología UCA, Lic. en Investigación Educativa, Universidad del Comahue (posgrado), Profesora Pro titular y Adjunta de la Facultad de Psicología y Educación y de la Facultad de Ciencias Sociales, Políticas y de la Comunicación UCA. Psicóloga de escuelas de gestión oficial del GCBA. Asesora en el Departamento de Psicología UCA del área Educacional, ,integrante del Equipo Técnico Jurisdiccional  de  Educación de GCBA. Profesora externa en capacitación docente en la Universidad Austral. Ha participado en diferentes congresos nacionales e internacionales. Ha escrito en forma conjunta “El aula un espacio de convivencia” de Editorial La llave y otros artículos que han conformado libros de la especialidad.

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