La otra Fabiana Cantilo

Por Daniel Horacio Grad

 

Fabiana Cantilo cambió, y ese cambio se percibe en todo su ser. Diríamos que es “otra”. Se nota en ella una transformación muy profunda. Es otra su forma de pensar, de transmitir lo que piensa, de comunicarse con el público y en este caso, con Generación Abierta. Tuvimos una charla con ella. La compartimos.

G.A.: ¿Cómo  presentarías a Fabiana Cantilo?
F.C.: Hoy: estoy trabajando en mi sexto disco con Ulises Butrón, Nicolás Posse y otra gente. Casi todos los temas van a ser míos y estoy grabando desde febrero. Ya está por producirse el hecho, si Dios quiere. Además tengo una productora propia que se llama “Querida Totó” y eso es todo un avance en el mundo comercial que me atañe.

G.A.:Tú disco “Sol en cinco” tenía mucho peso para vos en el título ¿qué después de “Sol en cinco”?
F.A.: “Sol en  cinco” lo único que tuvo en contra fue que lo hice un poco rápido porque la compañía me estaba presionando porque querían que haga el disco ya, entonces no había tantos temas míos. Pedí temas a mis amigos y el resultado fue un gran rejunte de estilos. “Sol en cinco”  es como un homenaje a mí misma. Además le dediqué el disco a mi abuela, que murió después. Tiene un gran video como el del tema “Nada es para siempre” y otro gran video de otro gran tema “Querida Totó , del cual estoy muy orgullosa.

G.A.: Hablabas de abrirte de las exigencias de los demás para responder a vos. ¿Qué pasa con eso? Los “de afuera” ¿exigen mucho?
F.C.: No. Supongo que es el devenir del tiempo. Al final querés que no te digan lo que tenés que hacer porque ya sabés lo que querés. Yo no quiero ser más “pop light”, donde era medio infantil. Sin querer lo hice porque me salía, pero ahora creo que hice un giro más con la música y más con los arreglos musicales de Ulises Butrón. Es todo más “alternativo”, por llamarlo de alguna manera.

G.A.: ¿Eso llevaría a decir que Fabiana Cantilo cambió mucho en este último tiempo?
F.C.: No. Yo pienso que evolucioné: tengo lo mismo que antes más otras cosas. No es que cambié y hago otra música. Pero tampoco puedo ser tan objetiva porque estoy muy adentro del disco, estoy muy metida en eso, estoy casi en la recta final. Tengo que empezar a escucharlo.

G.A.: ¿Creés en Dios?
F.C.: Sí. Pero…en la naturaleza más que nada, en una fuerza superior que nos creó. No creo mucho en la iglesia, creo en ciertas partes de la iglesia. Es una estructura muy rígida en algún punto. Creo que se derivó hacia otro lugar. Por mi parte, ahora, estoy haciendo meditación y eso es lo que me enseña, eso es con lo que estoy aprendiendo.

G.A.: ¿Creés que en Argentina hay justicia?
F.C.: Creo que en el mundo no hay más justicia. Hay de todo. Hay seres muy enfermos y hay otros que buscan un poco más la luz, la humildad, la paz, el no avanzar sobre otros o vivir con valores que no tienen nada que ver con estar apurados por llegar a algún lado o el dinero. No sé lo que va a pasar. Supongo que va a pasar algo medio denso porque no son más los buenos. Hay mayoría de “cosa rara” por ahí, de gente que llega al poder y se abusa, de gente que es muy egoísta. Creo que este país es en general muy egoísta, su gente no tiene demasiado sentido de la solidaridad, tiene una mezcla un poco extraña de razas, pero yo estoy en un camino de recuperación del espíritu que es lo que me parece nos puede llegar a salvar.

G.A. : ¿El músico se prostituye? ¿Por dinero tiene que dejar sus convicciones?
F.C.: Yo, por suerte, no lo tuve que hacer. Con la música no te podés prostituir. Hay gente que elige hacer música más comercial o darle a la gente lo que la gente pide. Yo elijo hacer lo que me gusta y, si la gente lo compra, mejor. No voy a hacer música que sé que va a vender para vender. Justamente puedo hacer otras cosas, por eso nunca lo hice. Toda la música que hago me gusta. Alguna vez un productor ha logrado que sea exitoso un tema que le gustó a él, pero el concepto no fue para vender más. Cuando grabé los temas de Andrés Calamaro fué porque me gustaban. Ahora Calamaro es un éxito. Tengo una “mini-visión”. Ahora quiero grabar más temas míos. Yo me guío por los sentimientos o por lo que tengo ganas de hacer, soy sincera.

G.A.: Nombrabas a Calamaro y hace tiempo habíamos hablado con él sobre el tema de las drogas. Para vos : ¿el músico y la relación con las drogas?
F.C.: Siempre está. Están muy juntos. De cualquier manera, ahora creo que se ha extendido a varios sectores. Yo estoy a un costado de todo eso. Creo que Andrés Calamaro estaba a favor de la legalización de la marihuana, cosa que me parece muy bien. El concepto es un poco sueco: lo que no te prohiben te dá menos ganas de hacerlo. Lo que pasa es que hay mucha hipocresía; los que agarran a la gente son los que venden las drogas. Los músicos, en ese sentido, no tenemos caretas. Yo sí no las voy con las drogas “pesadas” porque es medio destructor. Creo que los músicos estamos en otra etapa acá y en todas partes del mundo : la gente está retirándose del “reviente” porque no dá resultado.

G.A. : ¿El músico y el coqueteo con la muerte? o ¿el artista y el coqueteo con la muerte?
F.C.: Yo no lo sé. Lo debo tener algo negado. No coqueteo demasiado con la muerte.

G.A.: ¿Te sentís más con los pies en la tierra?
F.C.: No sé. Yo voy construyendo mis días a cada minuto, con las pequeñas metas que me pongo adelante. Creo que si estoy con los pies más en la tierra lo pueden decir los demás. Yo sinceramente, no lo sé.

G.A.: Te preguntaba si creías en la justicia si creías en Dios. ¿En qué más o en qué cree Fabi Cantilo?
F.C.:  En la gente que quiero, en mi familia, en los íntimos que me rodean, en la gente con la que estoy. Creo en una vida en la que todos los días se pueda disfrutar de pequeñas cosas y eso ya es muy difícil. Estoy tratando de disfrutar, de levantarme y de hacer lo que hago. Yo, en general, soy muy miedosa…en ese sentido puede ser que esté un poco mejor : conociendo más mis temores.

G.A.: Venimos siguiendo desde hace algunos números de Generación Abierta el tema de que afines de 1996 se cumplieron 30 años del rock nacional ¿Cómo ves esos años de la música desde tu lugar?
F.C.: Treinta años de gente que hace música y se expresa, de gente que hizo lo que pudo, todos grandes músicos. Yo estoy en una segunda o tercer generación. Aprendí mucho con ellos: con Charly García, con Luis Alberto Spinetta, con Fito Páez y todos seguimos creciendo.

Deja una respuesta